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Esta es la tercera parte de nuestra serie sobre educación en la infancia temprana de Nuevo México.
Desde que comenzó la pandemia, el Departamento de educación y cuidado de la infancia temprana de Nuevo México (ECECD, por sus siglas en inglés) ha realizado llamadas semanales a proveedores de cuidado infantil temprano en todo el estado, compartiendo información importante y desarrollando protocolos de seguridad mejorados. Además, el departamento también ha brindado el apoyo que tanto necesitan los proveedores de la infancia temprana, como la guía publicada recientemente para reanudar las visitas personales domiciliarias.
“Al principio del COVID-19, observamos cómo los proveedores de cuidado infantil temprano estaban desempeñando un papel fundamental en el cuidado de los hijos e hijas de los trabajadores de servicios básicos: personal de enfermería, médicos, socorristas”.
NUEVO MÉXICO SERIES DE EDUCACIÓN DE INFANCIA TEMPRANA
Más de 5 millones de comidas para familias
Cerca de 3,000 termómetros infrarrojo para los centros de cuidado infantil
Más de 13,600 kilos en paquetes de productos para bebés para comunidades nativas americanas en asociación con el Departamento de Asuntos Indígenas de Nuevo México
Más de 1,500 paquetes de equipo de protección personal con guantes, mascarillas y desinfectantes para manos
Casi USD 12 millones en donativos a través del Programa de estabilización y recuperación del cuidado infantil
Pago de incentivos específicamente para trabajadores de cuidado infantil, en asociación con el socio beneficiario OLÉ Education Fund, convirtiéndose en el segundo estado en hacerlo
El beneficiario de la WKKF OLÉ Education Fund, en Nuevo México, trabajó incansablemente durante semanas para abogar por el pago de incentivos, especialmente para los trabajadores de cuidado infantil, y su trabajo valió la pena. En mayo, el ECECD anunció un pago mensual de USD 700 directamente a los trabajadores, lo que convirtió a Nuevo México en el segundo estado en establecer un pago de incentivos.
El director de OLÉ Education Fund, Matthew Henderson, explica: “Al principio, durante el COVID-19, observamos cómo los proveedores de cuidado infantil temprano estaban desempeñando un papel fundamental en el cuidado de los hijos e hijas de los trabajadores de servicios básicos: personal de enfermería, médicos, socorristas”. Mientras las personas estaban en cuarentena, algunos proveedores se arriesgaron al mantener sus puertas abiertas. Henderson agrega: “El secretario Groginsky del ECECD respondió rápidamente a nuestros educadores; trabajando con aliados como la Asociación para la Acción Comunitaria, hemos logrado que nuestra red de cuidado infantil temprano esté mejor protegida”.
Durante varios meses, el departamento pagó a los proveedores con base en el número de inscripciones, no de asistencia, eximió los copagos de los padres de familia y continúa brindando cobertura de seguro para los empleados de cuidado infantil sin seguro que dan positivo a COVID-19. El ECECD también está proporcionando cerca de USD 12 millones en donativos, a través del Programa de estabilización y recuperación del cuidado infantil, para ayudar a los proveedores de cuidado infantil con licencia que se han visto afectados por la emergencia sanitaria.
La pandemia ha puesto de manifiesto las discrepancias de sueldo entre los trabajadores con salarios bajos, que a menudo identificamos como nuestros trabajadores de servicios básicos. OLÉ Education Fund está estableciendo alianzas con el departamento y otras organizaciones para abordar estas diferencias, especialmente en lo que respecta al salario.
Conozca más sobre el compromiso de Nuevo México de priorizar la educación en la infancia temprana.
NUEVO MÉXICO SERIES DE EDUCACIÓN DE INFANCIA TEMPRANA
“La Próxima Generación: El Mayor Recurso de Nuevo México”
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