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El Fondo LIFT es una colaboración pionera entre la filantropía y el mundo laboral que, con el apoyo de la Fundación W.K. Kellogg, apoya nuevas formas de organización de los trabajadores para lograr la equidad económica, familias prósperas y comunidades más fuertes.
Cuando Joanne Richards, proveedora de servicios de cuidado infantil, se convirtió en líder de su sindicato local, para ella era una forma natural de asumir su compromiso de servir a las familias y a su comunidad del condado de Passaic, Nueva Jersey.
Los cuidadores infantiles como Richards son los pilares de sus comunidades.
Durante los primeros años de los niños y niñas, que es el periodo más crítico para su desarrollo general, ayudan a proporcionarles los cuidados que necesitan para garantizarles el mejor comienzo en la vida. Estos proveedores también apoyan a los padres, que pueden trabajar sabiendo que sus niños y niñas reciben los cuidados que necesitan para prosperar.
A pesar del papel vital que desempeñan los proveedores de cuidado infantil en las comunidades de todo el país, ganan salarios de nivel de pobreza, generando un promedio de $14.22 por hora en 2022 y ganando menos que el 98% de todas las demás ocupaciones en los EE. UU. anualmente. La falta de un salario digno para los cuidadores infantiles también agrava las diferencias salariales entre géneros y razas, ya que el 90% de los cuidadores infantiles son mujeres y el 40% son personas de color.
En un sector lamentablemente subfinanciado, las mujeres negras y latinas mantienen a flote los servicios de cuidado infantil y las comunidades.
Para hacer frente a estos importantes retos de la fuerza laboral, surgió una colaboración única entre los sindicatos y una organización local sin fines de lucro. New Jersey Communities United (NJCU por sus siglas en inglés) y Communications Workers of America Local 1037 se asociaron para formar Workers in Early Childhood Action Network (WECAN! por sus siglas en inglés). Con el apoyo de donativos de The LIFT Fund, WECAN! se creó para construir un movimiento de cuidado infantil en Nueva Jersey para responder a la creciente crisis de cuidado infantil en Estados Unidos. WECAN! funciona con un modelo con enfoque comunitario que se basa en personas como Richards, que actúan como delegados sindicales de la comunidad y se extienden por sus comunidades para llegar a los proveedores uno a uno, estableciendo relaciones y estando atentos a los problemas que impactan a la vida laboral y al bienestar de los proveedores. A través de este modelo, WECAN! garantiza que los niños y niñas reciban una atención de calidad, que las comunidades sigan siendo vibrantes y que los proveedores de cuidado infantil trabajen en entornos seguros y ganen un salario digno.
“Como delegados sindicales, cubrimos zonas geográficas específicas en las que podemos conocer a los trabajadores y comprender sus necesidades. Desarrollamos el conocimiento de las cuestiones locales que están en juego para que los líderes sindicales puedan movilizar recursos que respondan a las necesidades cambiantes de los proveedores y de la comunidad”, dijo Richards.
La pandemia de COVID-19 demostró lo eficaz que es el modelo de WECAN! para abordar las necesidades de los proveedores y de la comunidad. Dado que los trabajadores esenciales tenían más necesidades de cuidado infantil que nunca, los cuidadores infantiles se enfrentaban al riesgo añadido de la exposición al COVID-19 y tenían pocos conocimientos sobre cómo mantenerse protegidos. Así pues, Richards y otros dos delegados sindicales de WECAN! se apuntaron a un programa de salud y seguridad con un enfoque de capacitar al capacitador, financiado por el estado con la Universidad de Rutgers. En cuestión de semanas, WECAN! capacitó a más de 350 cuidadores infantiles, contribuyendo así a la seguridad de los niños y niñas, las familias y los cuidadores de Nueva Jersey en una época incierta y aterradora.
Pero el trabajo de WECAN! no se detuvo ahí. Richards señala que los talleres sobre salud y seguridad sirvieron de ejemplo de cómo los trabajadores pueden desafiar las estructuras de poder desiguales y crear soluciones con enfoque comunitario. La rapidez y eficacia de la WECAN a la hora de proporcionar los recursos necesarios a los trabajadores a través de estos talleres les demostró el valor del trabajo organizado, lo que hizo que muchos se afiliaran formalmente a su sindicato.
“El periodo de pandemia ha demostrado la fuerza de nuestro modelo para atender rápidamente las preocupaciones de los trabajadores y lograr mejoras tangibles en sus condiciones laborales”, dijo Trina Scordo, Directora Ejecutiva de New Jersey Communities United. “Al reunirnos con los trabajadores y establecer relaciones a nivel de comunidad, proporcionamos la capacitación, el apoyo y la creación de poder necesarios para que consigan mejores condiciones para sí mismos y, a su vez, fortalezcan las comunidades en las que trabajan”.
El movimiento por el poder de los trabajadores del cuidado infantil en Nueva Jersey sigue ganando impulso a medida que aumenta los recursos para el cuidado infantil, amplía el acceso de las familias trabajadoras y mejora las condiciones laborales de los trabajadores del cuidado infantil en todo el estado. Richards ve que la tendencia también está cambiando; los talleres sobre salud y seguridad se duplicaron para educar sobre la “diferencia sindical”, dice Richards, cuando los proveedores de los centros vieron el poder que ejercen los proveedores familiares organizados para conseguir lo que necesitan.
A medida que más organizaciones y comunidades de todo el país se enfrentan a la cuestión de cómo contratar a más cuidadores infantiles, aumentar el interés y la viabilidad de estos puestos de trabajo y garantizar salarios adecuados y la protección de los trabajadores, WECAN! presenta un modelo exitoso de cómo mejorar de forma tangible las condiciones de los trabajadores mediante el desarrollo de su poder y capacidad para conseguir lo necesario.
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